Para empezar, ¿a qué nos referimos cuando hablamos de “Silicon Valley”? Pues bien, esta área ubicada en la bahía de Francisco es la sede de muchas compañías emergentes y globales de tecnología: por lo tanto, es todo un sinónimo de innovación y desarrollo.
Por este motivo, no es de extrañar que la ciudad de Elche (considerada como la “cuna del calzado”) sea comparada con esta zona de EEUU. La ciudad alicantina, donde se encuentran las instalaciones de HEE, tiene una rica tradición en la fabricación de zapatos.
Para que os hagáis una idea, la mayor parte del calzado español se produce en esta ciudad; concretamente en un polígono en el que se concentran muchas de las marcas más influyentes del país a nivel nacional e internacional. Es decir, en un pequeño espacio se concentra una gran cantidad de talento, empresas y conocimientos especializados en calzado.
Pero no todo ha sido positivo en este entorno, desde la llegada al mercado de la producción china aproximadamente en el año 2000, se ha producido un antes y un después en el sector del calzado. Desde entonces, han sido muchas las fábricas y empresas que han tenido que cerrar sus puertas.
Esto supone todo un desafío pero hemos de destacar que el panorama de este sector y el futuro de la ciudad de Elche como uno de los principales productores de calzado en España no es tan negativo gracias al cambio de pensamiento en los consumidores.
Este cambio de pensamiento implica una tendencia de los compradores a valorar por encima del precio factores como la calidad, los materiales sustentables y la apuesta por los diseños duraderos y atemporales.
Cada vez más consumidores están tomando conciencia de la importancia de adquirir productos que sean duraderos y que reduzcan el impacto ambiental. Valorar la calidad por encima del precio y optar por marcas comprometidas con la sostenibilidad no sólo nos beneficia a nivel individual, sino que también contribuye a la construcción de un futuro más sustentable.
Queda claro que es todo un reto pero es de agradecer que cada vez más las personas como consumidoras valoren todos estos atributos en contra del precio competitivo que ofrece China, algo contra lo que el producto español no puede competir si pretende mantener estos estándares de calidad.
En HEE, tenemos claros nuestros valores y nuestra visión. Cada día trabajamos para ofrecer el mejor producto hecho en España.